
4 Febrero #DMcancer Tratamientos especiales para nuestra piel durante y después del cáncer
El cáncer forma parte de nuestra sociedad en un porcentaje elevado. Eso hace que cada vez se esté avanzando en el conocimiento y manejo de la enfermedad desde diversas disciplinas profesionales, al margen de la puramente médica. Consciente de ello el sector médico avala y recomienda otras prácticas que conducen al individuo al bienestar físico y emocional. Así nace la ESTÉTICA ONCOLÓGICA
Siendo fieles a nuestros principios llevamos más de diez años dedicados a esta especialidad asesorando y participando en los cuidados estéticos durante la enfermedad del cáncer y después de ella.
Como todos sabemos los tratamientos oncológicos afectan a la piel, al aspecto físico (en muchos casos es transitorio), dando importancia al paciente que lo padece. Se sabe que si se les ayuda en esos aspectos su estado y la recuperación es más llevadera y rápida, dando una mejora en la calidad de vida, confianza y seguridad individual. La prevención y el tratamiento temprano ayuda a tener los menores efectos secundarios producidos por la medicación.
En nuestro Centro especializado en Estética Oncológica” abordamos con especial sensibilidad estas terapias y ofrecemos tratamientos estéticos faciales y corporales a todas aquellas personas que se encuentran en una de las diferentes etapas (diagnóstico, tratamiento o recuperación del cáncer) que proporciona alivio y confort físico y emocional)
Los tratamientos que se recomiendan abarcan un abanico muy grande desde los problemas faciales y corporales. Dichos tratamientos son “siempre” personalizados con productos adaptados a su necesidad, libres de parabenos y alcoholes. No utilizando aparatología.
Son tratamientos de 1 hora teniendo en cuenta que son personas delicadas con mucha necesidad a que les manifiestes que te importa su estado y, en especial, ellos mismos.
Los tratamientos llevan una primera consulta totalmente gratuita para ver cómo está la persona, su ciclo médico y qué es lo que más le importa o el motivo que les lleva a venir a nosotros. Sus precios son desde 50,00 € a 90,00€. Nunca son protocolos estándar
Los tratamientos que más hacemos son: hidrataciones y equilibrio a sensibilización de la piel cara y cuerpo. Hay personas que tienen un problema de acné producido por la toxicidad de ciertos medicamentos (quimio). En estos casos no son limpiezas tradicionales. No se deben de hacer extracciones y todo con mucha minuciosidad. Son cuidados pautados en cabina y en casa.
Y, también, hay muchas mujeres/hombres que después de unos tratamientos de quimio y tratamientos Diana necesitan unos masajes específicos impartidos por terapeutas para quitar las molestias que se tienen en ciertas partes de su cuerpo y esa sensación de hinchazón que en muchas ocasiones nos encontramos.
Todos los tratamientos son pautados por escrito y comunicados a su médico.
Desde mi experiencia son personas muy agradecidas y que requieren profesionalidad, delicadeza y mimo.
Principales síntomas sin contar los problemas del cabello
Los trastornos en las uñas y onicopatías, como pueden ser la aparición de líneas longitudinales o transversales y el engrosamiento o desprendimiento de la uña, además de pigmentación.
Las alteraciones a nivel cutáneo pueden ser diversas: deshidratación, sequedad, xerosis, sensibilidad, enrojecimiento, erupciones cutáneas, prurito, dermatitis, fotosensibilidad, cicatrices, eritrosis palmoplantar, parestesia en manos y pies… Como os comento, la piel es una zona reactiva y puede ocasionar trastornos muy diversos, aunque eso no significa que éstos tengan que aparecer, pues dependerá del tratamiento y de la persona.
También pueden darse alteraciones a nivel circulatorio y muscular: edemas, entumecimientos, hormigueo, dolores localizados, por ejemplo, en la espalda.
Según sea el diagnóstico pueden sufrir un shock emocional. Durante el tratamiento médico se preocupan por los efectos secundarios y después suelen tener miedo a cómo recuperar la normalidad después del proceso curativo.
Pero, quizás, a nivel físico lo que más les preocupa es “no tener pinta de enferma”; por eso se inquietan mucho por la posible pérdida de cabello, cejas, pestañas, el daño en las uñas, las secuelas de pasar por una cirugía…
Las toxicidades de la piel que conocemos y que pueden aparecer durante los tratamientos, ¿son distintas según la localización del cáncer?
A nivel general, las toxicidades cutáneas suelen ser las mismas: sequedad, irritación, prurito… Aunque, a veces, en los tratamientos diana, por ejemplo, para tratar una neoplasia de pulmón, el pelo se torna más duro y largo, mientras que en los tratamientos de quimioterapia colorrectal no suele manifestarse alopecia, aunque sí se pierde la calidad del cabello y, en algunos casos, aparece la parestesia, es decir sensación de entumecimiento, hormigueo… A nivel físico, el cuidado estético es integral y los tratamientos son más personalizados. Para ayudarles a cuidarse mejor siempre ofrecemos una primera sesión de pautas de autocuidado, para que conozcan los trastornos que pueden afectar a su imagen y cuáles son las soluciones que tienen a su alcance.
Procuro fomentar la positividad, crear una relación de empatía con mi cliente: tratando al enfermo y no a la enfermedad, escuchar conscientemente con comprensión, lo que llamaríamos “escucha activa”. En resumen, tratar al cáncer con respeto, pero sin miedo.
LA VIDA ES UN CAMINO DE OBSTÁCULOS DONDE HAY QUE MARCARSE UNOS RETOS QUE NOS AYUDAN A TENER ILUSIONES Y ESA ES LA BASE DEL EXISTIR.